¡Otra
tarde más aquí! ¿Por qué se me ocurrió acceder a que se apuntara al equipo de fútbol?
Menos
mal que encontramos la equipación, al final no estaba tan sucia, ni olía
siquiera, si la llega a meter en la lavadora tenemos drama, la madre siempre
tan limpia.
Esperemos
que hoy lo saque de titular, pero como
no sea que le regale un jamón al entrenador, no lo creo, con la competencia que hay, 25 jugadores son
muchos para un equipo, pero está de moda el fútbol, qué le vamos a hacer.
¡Ea!
Que empieza.
¡Hombre!,
de momento parece que sale, al medio centro, bueno, podría ser peor, podría
estar en el banquillo toda la tarde como el domingo pasado.
De
momento se mueve menos que un avión de mármol, niño, atiende que te van a
quitar en el medio tiempo, ¡qué sufrimiento! ¡No ves que te van a driblar y al
contrataque nos marcan!
Ya
está el padre de Juanito criticando al árbitro y casi no ha empezado el partido, madre mía, ¡qué tarde me espera!
Desde
luego esto no está pagado, con el frío que hace y yo aquí de pie viendo cómo
corren todos detrás de la pelota y sin acertar ninguno, con lo bien que yo
estaría en mi sillón leyendo, con una
copita. La madre en casa y yo pasando frío.
Desde
luego a algún padre le deberían dar tila en vena, pues no se ha saltado casi al
campo para increpar al árbitro, no me lo puedo creer. Desde luego lo de ser
árbitro es una profesión de riesgo, ni los bomberos en pleno verano.
Oye,
que se va para él, qué espectáculo, qué vergüenza, que lo pilla, no, parece que
está entrenado, al árbitro no lo pilla ni un guepardo, madre mía que
aceleración, que ya ha llegado al vestuario.
Bueno y ahora ¿qué hacemos? Porque este ya no
sale de allí.
¿Recojo
al niño o lo dejo que corra detrás de los jueces de línea como hacen los demás?
Porque el árbitro no les abre la puerta del vestuario y van corriendo buscando
refugio.
Pobres,
¿voy o no voy?, bueno ya han salido del campo. Estos no paran hasta su casa.
El
padre de Juanito ya está pegándose con otro padre del equipo contrario, pues yo
no voy a separarlos, que la semana pasada casi me dan a mí. No te lo pierdas,
mi hijo haciendo corro alrededor del
espectáculo.
En
fin, decidido, me lo llevo antes de que le vayan a dar y lo apunto a baloncesto
la semana que viene, que por lo menos es bajo techo y no se pasa frío.
José Luis Álvarez Cubero
Febrero de 2018
No hay comentarios:
Publicar un comentario